Sobre los estudios universitarios 3

¿Cómo puede alguien obtener mejor provecho de los cursos universitarios?En primer lugar, es preciso reconocer que no todos los cursos tienen la misma calidad. Del total de cursos que se reciben habrá algunos excelentes (y memorables e impactantes); otros que contienen muchos elementos muy buenos, pero incluyen también otros deficientes; hasta habrá algunos que caen en la categoría de mediocres, y unos pocos que al someterlos a evaluación y crítica resultan ser realmente malos. Pero, entonces, si la educación universitaria tiene tanto componentes excelsos como defectos, ¿cómo se puede aprender más para aprovechar esos años académicos? He aquí el método que yo he utilizado a menudo, en todo o en parte:

Hacer uso de la biblioteca para encontrar más fuentes de conocimiento, y así:
1 Leer fuentes primarias: Es decir, las obras de los autores que se están estudiando (además de las separatas y capítulos sugeridos y obligatorios). Vale la pena darles una hojeada general, y leer las partes que más nos llamen la atención.

2 Buscar libros especializados: Existen manuales sobre cada una de las áreas o materias que se estudian en cualquier carrera, hay también historias de un período en particular o sobre las diversas interpretaciones de un concepto, o bien estudios o ensayos que profundizan sobre un tema específico. Todo ello vale la pena leer y así ampliar los conocimientos sobre ese tema.

3 Consultar obras de referencia: Diccionarios, enciclopedias, glosarios en papel y buscar definiciones, así como los conceptos, y categorías, biografías o términologías técnicas que nos sirvan para entender más al autor o el curso que estamos recibiendo.

Hacer uso de Internet para encontrar más referencias y materiales de apoyo:
1 Localizar en los Departamentos de universidades extranjeras, y:
a) los programas de estudio de materias equivalentes a las que uno está recibiendo y ver que temas se estudian ahí, o cual enfoque le dan al curso equivalente;
b) entrar a las páginas personales de los profesores y buscar materiales de apoyo tales como guías, lecturas, textos, clases, etc. que se puedan consultar, imprimir u obtener como copia ;
c) examinar los textos de autores que se están leyendo en esos cursos y la bibliografía complementaria, para conocer autores nuevos e identificar autores ya conocidos, o aquellos que están accesibles en la biblioteca de la universidad local.

2 Buscar Portales o páginas especializadas en un tema o conjunto de temas afines, y:
a) localizar ahí artículos, ponencias, publicaciones en línea, revistas, etc. los cuales se pueden descargar a la computadora personal;
b) se pueden navegar recorriéndolos, sección por sección hasta dominar su estructura y contenido; y además, esos sitios suelen remitirlo a uno a otros sitios equivalentes en cuanto a los asuntos ahí tratados;
c) incluso, hasta hay blogs que contienen información buena y útil, aunque no hay que olvidar que a veces presentan opiniones muy personales o sus fuentes son oscuras.

3 Consultar Enciclopedias y Diccionarios en línea:
Suele haberlos especializadas en un tema cualquiera o un área del conocimiento, y sus artículos suelen ser escritos por especialistas, o bien por conocedores voluntarios (los wikis), de cualquier manera, siempre ofrecen un panorama general del tópico que uno quiere saber.

4 Usar los Buscadores (search engines) generales de Internet:
Es menos directo, pero si se usan las "palabras clave" (tags, keywords, subject headings) adecuadas, cualquiera de los buscadores de Internet arroja en sus resultados excelentes sitios que uno no conocía y que vale la pena visitar. Lastimosamente, lo mejor está en inglés. Pero, yo he probado hacer búsquedas en otros idiomas y he podido comprabar sitios muy buenos en otros países y en otras lenguas distintas del castellano.

Estos pasos son sencillos, si uno los practica con frecuencia se hace algo rutinario enriquecer el curso universitario con materiales externos y complementarios. El beneficio que se obtiene es grande: se aprende mucho más de lo que el profesor (bien calificado e intencionado, sin duda) quiso transmitirle a uno.